David Alonso De la Cruz

viernes, 4 de febrero de 2011

Increiblemente complicada esta situación, pero....






... le hecho combustible al corazon
y mi espiritu le dio la vuelta al mundo
me lleno de placer y por mas que me intento responder
hoy me pregunto
como fue no se decirte como fue,
no se explicarte que pasó
pero de ti me enamore
y como fue no se decirte que paso
pero de ti me enamore
porque desde el primer momento yo sabia
que eras para mi....


Why should I care
‘Cause you weren’t there
when I was scared
I was so alone

You
You need to listen
I’m starting to trip
I’m losing my grip
And I’m in this thing alone

COSAS QUE DEBO ACTUALIZAR:
Las circunstancias me tienen, de momento, leyendo libros de maternidad. Sin embargo, dado que son libros demasiado teóricos, llenos de exageraciones, horarios y absurdos del tipo: "¿Cómo reconocer si tu bebé está llorando?", o: "Una lágrima es conjunto de moléculas de agua que...". Tener que toparme con oraciones de ese tipo me hace querer buscar refugio en otras lecturas.

"Todo por una chica" de Nick Horby fue un buen motivo para recordar que existen lecturas ágiles, entretenidas, sutiles en ciertos aspectos y brutales en otros. La historia que cuenta Hornby en ese libro me recuerda a mi primer amor. Es la historia de un joven de dieciséis que se enamora y enseguida deja embarazada a su novia de la misma edad.

La forma en que a uno le va contando los primeros encuentros, el primer beso, el miedo que aborda a todo adolescente cuando se encuentra cerca de su primer encuentro sexual, hace que uno se enganche con la novela desde las primeras páginas.

El personaje principal es pudoroso y trata al lector como a un extraño del que va haciéndose amigo conforme van avanzando las páginas, o en alguien que, tan sólo por el hecho de no abandonar la lectura, merece que le cuenten más.

Es una novela que recomiendo. Con la cual una persona de cualquier edad puede identificarse con facilidad. Basta con haberse enamorado, aunque sea una sola vez, para que esa persona se vea a sí mismo en Sam, el personaje principal de la novela. Alicia, la novia y, a mi parecer, el símbolo de la belleza y la inocencia. Dos adjetivos que pueden parecer antónimos si se entiende lo bello como una tentación, como algo maldito al que le debemos huir, que debemos evitar.

Esa dualidad causó tal fascinación en mí que, a días de que editorial Planeta mandara mi segunda novela a diagramarse, decidí cambiar el primer nombre de la profesora Witz, uno de los personajes principales (sino el principal) en "Hay una chica en mi sopa". Le puse Alicia y así quedó. Pensé: Alicia tiene el mundo a sus pies porque es bella y consciente de ello. Sabe que puede seducir lo prohibido. Definitivamente, era el nombre que había estado buscando. Gracias Hornby.


*Para los que quieran escribirme, pueden hacerlo en:
delacruzmarin@gmail.com

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lee mi blog (http://paz-nadaestabien.blogspot.com/), tiene temas parecidos y seria genial que le hagas un poco de publicidad, gracias de antemano.
Me encanta como escribes, felicitaciones.